viernes, 17 de enero de 2014

VELAD

No vemos nada de lo que pedimos
y sólo se nos muestra lo que odiamos
así tras el temor nos contristamos
y creo que con esto te seguimos.

Te hiciste ofrenda: muerto así te vimos,
entonces tiernamente ya te amamos
con la piedad que tristes profesamos
¿Quare tristis incedo? te dijimos.

Nos diste en el dolor tus bendiciones
donándonos al Don que nos consuele
sufrimos con los miles de millones

y es mucho lo que ahora ya nos duele.
Es cierto que escapamos con canciones
mas tú te mostrarás a aquel que vele.


¡Oh cómo es cierto que anhelaste
comer la Pascua y darnos vida
con una muerte atroz y dolorida!
y diz que hasta el extremo nos amaste.

Es mucha distorsión la que cegaste
que estaba oculta adentro y contenida
y el hombre la lanzó y fue absorbida
por la bondad: ¡así la cruz cargaste!

Nos llamas a seguirte y lo olvidamos
huyendo como Pedro del martirio
y sin embargo así también te amamos.

y en Pascua te encendemos siempre el cirio
y tus palabras bellas escuchamos
pero el temor me turba hasta el delirio.