Creo Señor que el Padre te ha
enviado
y pido que la gloria sea
visible
en caso que me toca tan
temible
que si es común, con todo, es
impensado
No puedo imaginarme aquel
estado
de la familia trunca,
inamisible
parece el ser que has dado,
inconmovible,
y sin embargo dáñalo el
pecado
La muerte que destruye. Tú
has venido
a destruirla. Sea así ahora
según tu Providencia ya ha
querido
Abrázanos y danos sin demora
tu vida y todo quede en ti
sumido
y vea el rostro, ya, que mi
alma adora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario