miércoles, 5 de noviembre de 2014

ORO Y HABLO


       Señor debo rogarte cada día
       por los enfermos que están cerca mío
       Parece que no acepto su destino
       pero pedir ha sido tu pedido.
       Y yo que en especial siempre he pedido
       por la familia joven ahora tengo
       Esta desdicha que parece absurda
       en el momento en que ya cosechaba.
       Por ello más y más este argumento
       repito: son sus niños y su esposo.
       Es cierto que no son aquí ellos solos
       y mueren tantos de diversos modos
        y sé que nos aguardan tus moradas.
        Pero te pido porque estás conmigo
        y en esta cercanía soy tu amigo
        ¡He caminado mucho ya a tu lado
        en este valle en tardes imborrables!
        Las horas las conservo en mi memoria
        y todas las liturgias eucarísticas.
         Por ellas es que debo orar por ellos

         y a Ti te correspondo en tu llamado.    
        A ti Señor a Ti yo solo quiero
        y en ti a mis hermanos tan cercanos

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