sábado, 28 de febrero de 2015

EL MONTE DE LA TRANSFIGURACIÓN

¡Oh me siento tan solo buscándote ahora!
O quizás es la lucha que llevo ya en contra de aquellos
que los llevan a todos detrás de entertainments y filmes.
Me tortura este hecho creciente que absorbe a los míos
Mientras tanto el otoño destila unos cielos profundos
que nos llaman adentro, enflaquecen las almas sin gracia.
Tú sembraste semillas, resiembras, la tierra es muy seca.
No hay espíritu y hay libertades de ver tantas cosas.
Por momentos me encuentro confuso y rodeado por diablos
que sonríen pues nadie me cree y aceptan los medios
de increíble torpeza que atontan y anulan sagrarios:
las personas, las únicas,solas, sustancias primeras.
No es extraño que el mundo insipiente pragmático y técnico
recusara la enjundia de tales sustancias dejadas
por el plato de rojas lentejas del mundo: ¡accidentes!
Oh Señor lo invitaste a aquel joven muy rico: ¡y son muchos
seguidores del mundo encerrado! mas ellos se pierden
el enorme horizonte detrás tus pasos que es "ese
no sé qué" que se alcanza en ventura y que ahora probamos
siendo imágenes tuyas: la fuente que salta a lo eterno.
En el monte brillaste: hoy te ruego por ellos, los míos.
¡Que la dulce oración supla todo y lleguemos al cielo! 

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