POBRES Y RICOS

¡Qué pobres y que solos nos hallamos
si ya contigo aquí no caminamos!
La tarde escapará sin fruto cierto
y el tiempo al transcurrir ya estará muerto.
Si todo es muerte y tú hoy eres la vida
¡oh toma nuestra vida transcurrida
recapitula en ti mis simples horas
y sume en luz eterna mis auroras!
Yo sé que estás ahora aquí conmigo
desde que me llamaste a mí tu amigo.
Mi peso y mi pesar son mis cercanos
pues son llevados fuera de tus manos.
Te pido que tu Espíritu hoy invada
sus almas y la enferma sea sanada.