jueves, 2 de julio de 2015

VENGA A NOSOTROS TU REINO

Uno llega a tener más edad y por sus obras los conoce. Uno ve ahora la pornografía como desafío universitario. No se conforman Señor con la cultura de los medios sino que avanzan a lo sagrado. También pretenden hacerlo con la Iglesia. Uno va creyendo de a poco en el Apocalipsis que dibuja a la bestia. Uno ha frecuentado los salmos un poco y piensa cómo los monjes los cantaban sin universidades pero con sabiduría sin luz eléctrica pero con lumen gratiae sin pluralidad de tareas y visiones pero con sus tiempos en la eternidad oferente. Pues sí ¡oh Señor de las luces! tú nos pides hospedaje desde que volviste al Padre y nosotros hacemos mundo y cultura.
Pero yo te necesito como el salmista:
ESCUCHA MI CLAMOR ESCUCHA LA VOZ DE MI ORACIÓN. Y yo me pongo junto a tu madre y pido serenidad para recibirte.
¡Que se abra el cielo con tu venida! Especialmente a quien espera partir en estos días: requiere que envíes a buscarla. Suavidad y dulzura necesitamos:la que tendremos junto a ti en el cielo. Venga a nosotros tu reino.

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