martes, 30 de junio de 2015

CONFÍA EN ÉL Y OBRARÁ

El salmista clama a tí Señor y te alaba sin conocerte. Confía en tí porque has hablado a su pueblo y siente que le hablas a él mismo: HABLA QUE TU SIERVO ESCUCHA.
Te lanza flechas para que atiendas sus demandas de paz, porque está inquieto hasta que no descanse en ti. Es decir: siente su fragilidad ontológica y sabe acerca del DIOS CERCANÍA o YAHVEH y además te siente ya a ti intimamente.
¿Y nosotros Señor que te vemos afuera, ya en cruz?
Era grave Señor la distorsión del mal para que desde allí ahora nos llamaras tú cual el salmista cono un salmo: ¿DIOS DIOS MÍO PORQUE ME HAS ABANDONADO?

Así me siento yo en este preciso momento y espero en Ti porque -como el salmista- sé que obrarás.

No hay comentarios:

Publicar un comentario