TE PERTENECEMOS

Danos tu luz en medio de estas lomas,
vivientes por la vida en ti pensada
para la creatura y dispensada
al hombre, el signo propio donde asomas

tú mismo, cual verdad, cuando la tomas
a la natura humana ya agraciada
en nuestra madre, ya humilificada.
Culturas técnicas se vuelven romas 

y al intelecto antiguo lo ensuciaron,
seguro bajo acción de aquel sofista
que muchos santos solos denunciaron,

narradas por más de un evangelista:
astucias que a Jesús hombre tentaron
y reinan de este mundo ante la vista.

Si hiciste que los ciegos ya te vieran
de vida eterna lógicas primicias
¿por que no darme a mi estas albricias
que también hijos míos hoy te quieran?

Que aquel camino estrecho ya prefieran
dejando de este siglo las franquicias,
gustando de las íntimas delicias
que tus palabras claras prometieran.

Los íconos te miran y te adoran
modestos, sosegados y serenos
¿Acaso en ellos tú y el Padre moran?

Te pido que mis hijos sean plenos
con la visión que aquellos rememoran
y que ya sean nuestros y no ajenos.