viernes, 7 de junio de 2013

UNA PALABRA TUYA BASTARÁ PARA SANARNOS

Conocimos muchas personas y cada una tiene su propia vida y aparte la desarrolla sin que haya entre uno y el otro comunicación alguna de las íntimas latencias del hogar. Solamente algunas nos son cercanas por ser hijos o hermanos, pero en forma muy superficial.
¡ESTAMOS TAN SOLOS! Sí que nos acompañan los sucesos del mundo que todos al mismo tiempo compartimos pero ¡estamos tan solos aquí adentro! Cualquier rotura no encuentra fácil soldadura y el misterio de la iniquidad que opera parece avanzar por las fracturas.
Uno avanza por los misterios, el de la gracia y el de la iniquidad, y está envuelto en tantas palabras superfluas. ¡Oh Señor habla tú solo y sánanos para que podamos ir a ti!

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