EL CAMBIO DE LA IGLESIA

Sí soy argentino y hoy se eligió un papa de mi país que nació en el barrio de mi madre en Buenos Aires. Además fue maestro de mi amigo sacerdote que está en Roma y es jesuita y habló con él. Es especial cuando un acontecer semejante pasa tan cerca de uno.También creo que mi providencial y reciente viaje a Roma adonde fui invitado de golpe y mi conversión a la visibilidad de la Iglesia de Pedro está muy relacionado con esto.
Pero ¡ay Señor! después de haber escuchado horas a los hombres hablar del hecho ya me da ganas o bien de irme con Ratzinger a la clausura o recluirme en la montaña por años sin escuchar más moralinas y estrecheces sociales y políticas y sobre todo culturales por las cuales quieren invadir o cubrir la Iglesia con toda clase de reivindicaciones y creen que el pecado es una cosa política y no constitucional en el hombre que perdió la integridad y no soportó el embate de la concupiscencia ¡Le quieren aplicar el nunca más al pecado y a la corrupción como si después de echar un demonio no vinieran otros siete peores! En un misterio el pecado y opera y tú lo has vencido pero cada uno debe hacerlo en la gracia. ¡Bástate mi gracia le dijiste al apóstol perfecto acosado por el aguijón!
Hoy Señor te necesito más que nunca ¡Que se callen tantas voces mundanas o periodísticas y sienta el silencio de tu presencia! Tú dijiste que pidamos en tu nombre. Pues bien tenemos papa pero ven Tú  hacer morada, a hacer Iglesia en quien te pide esto ¡Que este sea el cambio de mi parte: que vengas tú a hacer tu morada y que yo te hospede!
¡Cambien ellos todo lo que quieran y lo que tú permitas! Pero cambie yo por recibirte en mí y salir a caminar contigo por los senderos. QUE LA LUZ BRILLE EN LAS TINIEBLAS Y QUE ELLAS TE RECIBAN Y QUE SEA YO HIJO DE TU PADRE CELESTIAL.