LOS ESCÁNDALOS

Parece que te pidiera que me quites el dolor. En realidad lo que te pido es que se produzca la conversión de mis hijos y la reconversión nuestra. En realidad lo que te pido es que el enemigo no se goce con la decepción y el fracaso de lo bueno que pretendimos. ¡Te pido la conversión y el triunfo de la voluntad de tu Padre en nosotros.
Parece que solo yo sé y pienso en el odio del que era homicida desde el origen y que está de algún modo espiritual acechando y ocupando posiciones como en una guerra. Tú has vencido al mundo ¡concluye con esta victoria! Y el modo general en que lo hace ya lo vemos en grande: ¡es el posmodernismo con la abrumadora di-versión y apelación a los derechos del individuo en sus impulsos de placer y de construcción momentánea de unidades de vida y proyectos particulares ¡Se habla derechos individuales no de la persona! Hay aquí deber para con una medida trans individual. Bueno pero lo que quieren es destruir lo sagrado de todo y sobre todo del matrimonio, quieren acabar con matrimonio, estado e Iglesia.
Tú lo dijiste: Es imposible que no existan escándalos pero ¡ay de quien proceden!
Señor di una palabra y mi hijo y mi familia quedará sana.