lunes, 12 de septiembre de 2011

TU MANO ME ACARICIA Y ATARDECE

  Siempre en cada tarde llamas al más acá donde el acontecer del ser se lleva a cabo y el hombre está sumergido en sus cosas y sentimientos de su vida. Tú estás llamando y el hombre nada en sus pasiones y te deja pasar. Yo hoy te sentido y salido a buscarte pero a mi vuelta me esperaba el gran ataque de los demonios del cual habla Tomás en el tratado de los ángeles que está en la Primera Parte de la Suma, cuando se examina la creación de los ángeles. Dejas Señor, les permites que conspiren y ataquen a quienes te buscan ¿o acaso parece solamente? El juicio develará la intención de los corazones,mientras tanto, pedimos que nos libres del maligno. LO HAS PEDIDO EN LA ORACIÓN SACERDOTAL Y SE TOMA A LA LIGERA. Como todo lo que cae en manos del hombre.
  Señor te pido que alcancemos una estabilidad y apartes al enemigo de la pareja humana que él pretende separar y que él confunde, decepeciona y acusa ya que es el ACUSADOR. Lo experimentamos a diario y sin embargo se soslaya para no pensar.
  ¿Cómo oprimes el corazón con tus santas manos y dejas que arroje odio el anti hombre Dios en nuestros corazones? Respuesta porque precisamente allí el Espíritu derrama tu AMOR. El corazón del hombre es inconstante, tú solamente permaneces.

No hay comentarios:

Publicar un comentario