Tú sí eres delicado
el hombre afín al áspero pecado
me hace perder de vista
el fin que nos has dado
cuando has querido que también exista
contigo cual persona
y así he caminado
en tu hoy que plenitud feliz nos dona.
¿Qué más puedo pedirte sino lo contemplado?
Un día y otro día
esta existencia es mía
(los hombres la aprovechan
por más que la verdad ya la desechan:
se quedan con la cáscara vacía).
Y es para ti y en ti estatuida:
por ello eres mi vida
y yo te busco ahora,
mi tiempo se demora
en la mansión del ser.
¡Oh ven disipa mis temores para
que ya te pueda ver
si yo he de verte luego cara a cara!
el hombre afín al áspero pecado
me hace perder de vista
el fin que nos has dado
cuando has querido que también exista
contigo cual persona
y así he caminado
en tu hoy que plenitud feliz nos dona.
¿Qué más puedo pedirte sino lo contemplado?
Un día y otro día
esta existencia es mía
(los hombres la aprovechan
por más que la verdad ya la desechan:
se quedan con la cáscara vacía).
Y es para ti y en ti estatuida:
por ello eres mi vida
y yo te busco ahora,
mi tiempo se demora
en la mansión del ser.
¡Oh ven disipa mis temores para
que ya te pueda ver
si yo he de verte luego cara a cara!
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